Tarea número 10: Un microrrelato sentido.
Dentro de una cueva... Hacía frío, un frío seco, semejante a los que abundan en los países de centroeuropa. La única luz que alumbraba la cueva, era la de la luna llena, que gracias a un gran agujero en la parte superior, podía entrar. A causa de esta luz, la cueva se teñía de tonos azulados, desde los más oscuros hasta los más claros. En medio de ésta se encontraba un gran lago que ha simple vista daba la impresión de poco profundo, pero para mi sorpresa era todo lo contrario. Al asomarme, observe un gran abismo, no podía creer como un cueva así, podría tener un lago tan profundo como aquél. En aquella cueva era tal el silencio, que lo único perceptible al oído humano era el gotear del agua, provenientes de las estalactitas, ubicadas en el techo de la cueva.